
Cuatro años no son nada
Han pasado cuatro años desde que El Equipo A desapareció, no fueron las balas, ni una pirueta mortal con un cuatro por cuatro lo que acabó con nosotros, fue algo mucho más mundano y que nos afectó a todos; la maldita crisis.
El último acto de servicio fue la recogida de un premio Agripina a mejor campaña publicitaria en Andalucía, era septiembre del 2013 y cuatro meses después la agencia sucumbia a la realidad económica del país.
Cuatro años después y tras un periplo por tierras mexicanas, hemos vuelto, pero lo hacemos diferentes, cambiados, evolucionados y con la lección aprendida. Hemos tenido que armarnos de valor porque seguimos creyendo en lo que hacemos, creemos en la buena publicidad, esa que te llega y te toca, la que que te arranca una emoción, esa que comentas al día siguiente en el cole, el bar, el ascensor o en el curro, porque la comunicación nunca pasará de moda, porque es lo que nos hace ser diferentes a otros seres vivos; expresar lo que sentimos para empatizar con otras personas.
Por eso, en nuestro periplo por tierras mexicanas nos dimos cuenta que emprender de nuevo era una locura o un acto de valentía absoluto. Descartamos la locura, más que nada porque no estamos locos y sabemos lo que queremos, y nos quedó la valentía, de ahí surgió el nombre; Bravísimos, y el slogan “la valentía de conectar con la gente”.
Así que aquí estamos, de vuelta, creando una nueva agencia de publicidad que pueda aportar valor a la comunicación de las empresas sevillanas, andaluzas, nacionales y extranjeras, no nos cerramos a nada, porque la comunicación no tiene límites, al menos no en este planeta. Somos unos amantes de la buena comunicación, ya sea a través de la publicidad, el diseño, la fotografía, la tipografía, la ilustración, el branding o el marketing, por mencionar algunas de las ramas que completan la comunicación comercial como la entendemos hoy en día.
Han pasado cuatro años desde ese premio que reconocía nuestro éxito creativo, cuatro años desde esa campaña de Scalpers que asaltó los telediarios, esa campaña del gitano como se le conocía en las tertulias populares, cuatro años desde que una agencia de publicidad en Sevilla asaltaba sin complejos la creatividad y se ponía a la altura de las más grandes del país. Cuatro años no son nada, y menos si te armas de valentía; somos Bravisimos y hemos vuelto para quedarnos.